La primera prueba de fuego para la Selección Nacional de México tras superar la fase de grupos en el Mundial Sub 17 fue ante Paraguay en la ronda de octavos de final, conjunto que llegaba sin conocer la derrota.
Durante los primeros minutos el conjunto sudamericano lució mejor en el terreno de juego, pero sin oportunidades en el arco azteca.
A pesar de esto, sería el equipo de Miguel Gamero quien conseguiría abrir el marcador a los 16’ de acción en un cobro de tiro de esquina donde Berenice Ibarra logró rematar completamente sola a segundo poste.
Con la ventaja en la pizarra, el conjunto tricolor se hizo del control del balón con un par de aproximaciones peligrosas sobre la portería de Tamara Amarilla que estuvo siempre atenta.
En el complemento, las paraguayas apostaron por adelantar líneas con Bárbara Olmedo sumándose al ataque e intentando con disparos desde fuera del área, pero la más peligrosa sería nuevamente mexicana con un tiro libre de Bere Ibarra que se estrelló en el travesaño.
Por su parte, las de Luis Guimarães buscaron aprovechar a la contra con par de mano a mano por parte Claudia Martínez, pero Valentina Murrieta estuvo siempre atenta en el fondo.
En los últimos minutos las malas noticias llegarían para el equipo paraguayo pues Luz Benítez saldría de la cancha por una fuerte lesión en la rodilla.
Con México rechazando prácticamente todos los balones el tiempo continuó su marcha y de esta amanera selló su boleto a cuartos de final donde se medirá ante Italia.
