Atlas está al borde de la eliminación luego de caer, en su visita a suelo hondureño, ante el Olimpia de Tegucigalpa, cuatro goles a uno, y requiere de un auténtico milagro si quieren seguir en la Liga de Campeones de la CONCACAF; el partido de vuelta se jugará una semana después en el Jalisco.
Fue de inmediato que las aguas se moverían, dado que Kevin Josué López adelantaría a los catrachos madrugando a los zorros que previamente se habían visto mejores en el árido césped del Olímpico Metropolitano. Dicho esto,los rojinegros no bajaron los brazos, y al 15’ hallaron su premio que llegó en forma de penal (eso sí, gracias al VAR), se mostró seguro y selló el empate magistralmente.
Tras este escenario, los dos equipos fueron elevando la intensidad en su juego, junto a ello también más faltas que se castigaron con tarjetas amarillas para cada bando. No obstante, el equipo mexicano se propuso a desnivelar la balanza en el 38’con un remate del habilidoso Ozziel Herrera quien estuvo cerca de cantar el gol de la voltereta que le permitiera a Benjamín Mora tener más tranquilidad.
Al arranque del segundo tiempo, los tapatíos mostraron deseos por posicionarse al frente en el electrónico, pero no fue hasta el 55’ que la historia se repetiría casi igual que el anterior set, pues Jorge Benguché disparaba sobre el centro del área con la seguridad de que Vargas no controlaría el balón.
Los zorros volvían a caerse, y la situación se complicaría aún más cuando al 61’, el mismo VAR, que antes se había presentado, le daba a Bengston una oportunidad invaluable desde los once pasos que no desaprovechó. Sin embargo, la noche pintaba para algo histórico, y en el 72’, Benguché nuevamente se hacía presente en la contienda al protagonizar el cuarto para los suyos, y dejar la serie cuesta arriba para los de Guadalajara en el partido de vuelta.